Carlos San Juan, de 78 años, es el creador de la campaña “Sóc major, no idiota”/“Soy mayor, no idiota”. Recoge el malestar de la gente mayor (y no tan mayor) por el trato inhumano del sector bancario hacia la gente con menos conocimientos tecnológicos. La brecha generacional también es una brecha digital, y tiene consecuencias negativas en el acceso a los servicios bancarios (al propio dinero de los/las clientes) y también un impacto negativo sobre el trato que reciben las personas, especialmente mayores, desamparadas ante unos avances tecnológicos que no conocen. Perder el trato personalizado y obligar a utilizar cajeros automáticos o aplicaciones para el móvil está desplazando a personas que, tras décadas trabajando, ven como se les ignora en cuestiones tan básicas como la gestión de su dinero.
Citamos a Carlos San Juan “Sabemos que la digitalización es imparable, pero los bancos se han convertido en un autentico monopolio digital cerrado a cal y canto a los más vulnerables y olvidan que son un servicio público, porque las pensiones, las multas y todo hay que hacerlo a través de ellos”.
Desde PODEMOS Gavà pedimos a las bancos que cambien el modelo actual. No se debe menospreciar a una generación por su edad. No es más importante el beneficio económico del banco que el trato humano y el respeto hacia las personas con menos conocimientos tecnológicos.
La gente mayor merece respeto, consideración y un trato justo y humanitario. Debemos facilitar medios y recursos (tecnológicos y humanos) para que cualquier persona, tenga las capacidades que tenga, se sienta integrada en la sociedad.